Impacto económico-financiero de unos Juegos Olímpicos
Tic tac tic tac 3, 2, 1…. ¡Empieza la cuenta atrás! El próximo 26 de julio se inauguran en París los 33º Juegos Olímpicos de la era moderna, y se calcula que tendrán un impacto económico superior a los 10.000 millones de euros durante los próximos 10 años.
¿Quién y cómo se designa una ciudad olímpica?
El Comité Olímpico Internacional (COI) es el organismo encargado de evaluar y seleccionar la mejor candidatura. El proceso para ello tiene en cuenta múltiples factores como recursos económicos, infraestructuras, apoyo político … La designación de la ciudad elegida no siempre se libra de la polémica y en ocasiones la sombra del tráfico de influencias sobrevuela un proceso que debería ser garante de Fair Play. Postularse como ciudad Olímpica es de por sí un proceso largo y costoso, y en el caso de París el trabajo, para que en unos días inaugure sus terceros Juegos Olímpicos, empezó en 2014.
Impacto económico de unos Juegos Olímpicos
El impacto económico de unos Juegos Olímpicos es un argumento clave, tanto para los defensores como para los detractores, de este tipo de mega eventos. ¿Cómo calcular este impacto económico? no hay una respuesta única a esta pregunta, algunos expertos lo vinculan al crecimiento del PIB, como la Universidad de Comillas en su estudio sobre el “Impacto económico de los Juegos Olímpicos para la ciudad anfitriona”, pero este criterio deja fuera impactos sociales y ecológicos, difíciles de traducir a nivel económico. Este año Christophe Lepetit, responsable del Centro de Derecho y de Economía del Deporte (CDES) de la Universidad de Limoges, presentó, junto al COI y con la participación de la OCDE, una metodología estándar para el cálculo del impacto económico. Esta unificación de criterio tiene en cuenta el impacto a largo plazo y efectos tales como la construcción de viviendas o de transporte público, esto permitirá comparar futuras ediciones de los JJ.OO de forma más fácil y transparente.
¿Cuánto cuestan unos JJOO?
La respuesta es difícil, y cada edición es un mundo, pero lo que tienen en común todas las ediciones es el desajuste entre la previsión de coste inicial y el coste final, en algunos casos, como Atenas 2004 o Sochi 2014, lo llegaron a quintuplicar.
El gasto, o coste, en infraestructuras es la partida económica de mayor relevancia, y esto es algo común en todas las ediciones de unos JJOO. Las infraestructuras comprenden tanto aquellas que deben garantizar un buen acceso (aeropuertos, puertos, carreteras, transporte público…), como aquellas que deben albergar a los visitantes (hoteles), los atletas (villa olímpica), y, como no, las pruebas y ceremonias (estadios, centros acuáticos…). Es precisamente la reutilización de estas infraestructuras y el coste de su mantenimiento, una vez finalizados los JJOO, lo que decanta la opinión de muchos expertos a la hora de clasificar, como positivo o negativo, el impacto de unos JJOO.
¿Qué empresas se benefician de unos JJOO?
Los organismos públicos, involucrados en cada edición, son los encargados de establecer los criterios para otorgar los contratos a las empresas que llevarán a cabo las obras y actuaciones necesarias. Este tipo de contratos suele estar al alcance de muy pocos, debido a los requisitos de recursos propios y la especialización necesaria. Las grandes empresas constructoras compiten por hacerse con este tipo de licitaciones y, en algunos casos, se constituyen como UTEs para afrontar retos de gran envergadura. Las grandes empresas trabajan habitualmente con subcontratas, y son este tipo de empresas, de menor tamaño y mucho más especializadas, las que pueden tener más problemas a la hora de cobrar a tiempo sus servicios.
¿Cómo el factoring puede ser clave para proveedores olímpicos?
Aquellas empresas que actúan como subcontratas, son las que se pueden ver más afectadas por demoras en el pago de sus servicios, para ellas el Edebex factoring es una herramienta financiera óptima para garantizar la disponibilidad de líquido, y hacer frente a salarios y obligaciones tributarias que no esperan.
